lunes, 22 de mayo de 2023

Un sueño de 25 años

El 28 de Junio de 1998, se certificaba la vuelta al fútbol profesional del Málaga. Una ciudad que había permanecido en un ostracismo futbolístico desde la desaparición del C.D. Málaga a principios de los años 90, regresaba a la élite de este deporte con una afición que se frotaba los ojos ante la machada para ascender en el último partido ante el Terrasa con dos goles de Pablo Guede logrando quedar primeros del grupo de ascenso y ante la gran actuación posterior en Segunda División, ya de la mano de Joaquín Peiró, en la que el equipo se mantuvo en cabeza todo el año y acabó liderando para subir a la entonces llamada "Liga de las Estrellas".

El Málaga estaba en Primera División. Esa situación tan inesperada y bonita, vivida por los ojos de un niño, crea una pasión que, sin saber muy bien por qué, se vuelve de por vida.

Han sido 25 años de alegrías y de muchas tristezas. 25 años que dieron para la victoria del novato en el Camp Nou con Valcarce y Agostinho rompiendo la banda. De los Dely y Darío deslumbrando en Europa en una Copa de la UEFA en la que la crueldad de los penaltis decidió que el sueño acabase en cuartos de final ante el ajedrezado Boavista portugués.

Desde Basti, Roteta, Catanha a Wanchope y Amoroso, Fernando Baiano, Miguel Ángel, Sandrito y sus pases en su doble etapa, Coke Contreras, Rufete, De Los Santos, Movilla,  Duda y su guante en la izquierda, el descenso a Segunda y ascenso con Muñiz y su equipo de desconocidos como Weligton, Eliseu, Hélder Rosario, Nabil Baha... La venta de la propiedad y la llegada de los jugadores top como Cazorla, Monreal, Van Nistelrooy, Baptista, Saviola, Toulalan. La Champions.

Y el declive posterior, el dejar morir a un equipo muy poco a poco a base de malas decisiones desde la cúpula hasta su consiguiente descenso a Segunda, un descenso que, esta vez, ha sido letal.

Nos vamos del fútbol profesional. Pero este escudo ya sabe que, aunque sea por campos de barrio y de barro, una legión de fieles que ha ido amalgamando por este camino de 25 años además de los más veteranos que ya permanecían, van a seguir y a acompañarle por las travesías que tengan que venir. 

lunes, 15 de mayo de 2023

Los culpables del descenso

El Málaga C.F. se ha dado de bruces esta jornada con la realidad de un descenso que se hace más tangible de lo que ya era. Todo ello gracias a los buenos resultados de los rivales directos por la salvación, todos ellos por encima de los de Martiricos en la tabla, que habiendo puntuado esta jornada dejan su permanencia certificada.

Tan solo queda una remota opción de poder alcanzar al Sporting de Gijón en la tabla. Esa opción pasa por que los asturianos pierdan sus dos partidos restantes, ante el Eibar en Ipurúa y ante la Ponferradina en El Molinón. En ese último partido parece muy complicado que los de Miguel Ángel Ramírez dejen pasar la opción de permanencia ante una Ponferradina que lleva muchos partidos arrastrándose por el césped exceptuando el encuentro que jugaron hace una semana ante el Málaga, donde se llevaron los tres puntos gracias a que el Málaga no supo dar la talla (o algunos no quisieron como dejó entrever Sergio Pellicer) en el Toralin.

En fin, lo claro es que en el seno de la afición malaguista tenemos ya un callo hecho de sufrimiento que no da para más. Asumimos el descenso, no nos queda otra. Pero no podemos asumir que los responsables de ésto salgan indemnes. Que se vayan de vacaciones y el año que viene ya tendremos el futuro atado en otros lugares en el fútbol profesional, y al Málaga, pues que le den. Por lo menos aquí van a quedar para siempre plasmados esos nombres de los culpables de este desastre:

Esos Bustinza, Juanfran MorenoN'Diaye, Manolo Reina, Javi Jiménez, Genaro, Fran Sol, Gallar, Jozabed, Lumor, Luis Muñoz, Burgos, que (algunos) no se han implicado y no han sido nada profesionales, ya sea por ineptitud o por cuestión de actitud.  Manolo Gaspar, junto a todo su equipo los cuales no sé qué siguen haciendo formando parte del Málaga C.F. Gente como Francisco Capote y el resto de los que componen esa cueva llena de ineptos que solo saben chupar del bote. Y de ese Ruíz Guerra que parece ser que huele los malos augurios para volver una y otra vez a una entidad en la que nunca ha pintado nada para bien.

Son culpables también (aunque duela decirlo) tanto Pepe Mel y su cuerpo técnico por no haber sabido decir que NO y haber alargado la agonía de un equipo que no eran capaces de levantar, como Guede y su cuerpo técnico y su horrible preparación de pretemporada donde se gestó esta birria vergonzante de equipillo que no habría dado la talla ni en una liguilla de jubilados.

El dolor nos lo llevamos los seguidores. Y para más inri, ahora se forman divisiones y sub-divisiones entre la afición fruto de la tensión que ya hay, y que es agitada por unos cuantos ultras que reciben, incomprensiblemente, poder desde el club y que bien parecen salidos de otra cueva con ciertas ideologías y formas más propias de siglos pasados.

En definitiva, solo queda la esperanza de que a los altos dirigentes, tanto a José María Muñoz (administrador judicial de la entidad) y también culpable por no saber prescindir de la dirección deportiva a tiempo como Kike Pérez (Director General) no les tiemble la mano a la hora de cortar cabezas y saquen a tanto chupóptero inepto de los puestos de toma de decisiones deportivas del Málaga C.F.